El que posee las nociones más exactas sobre las causas de las cosas y es capaz de dar perfecta cuenta de ellas en su enseñanza, es más sabio que todos los demás en cualquier otra ciencia.
Aristóteles
El piropo lanzado por el filósofo griego a los profesores esconde una realidad que se ha dado por sentado durante varios siglos: los docentes deben saber y saber explicar lo que saben.
Hoy, sin embargo, da la sensación de que se valora más la forma de transmitir la información y la gestión de la misma más que el hecho de que la persona deba poseer dicha información. Los continuos avances en la sociedad de la información y la comunicación hacen que cualquiera pueda acceder al conocimiento con un par de clics o con unos cuantos movimientos de pulgar. Por tanto, ¿qué conocimientos puede añadir una persona que no tenga Google?
Y ya no solamente Google, ahora están de moda las clases OnLine. Plataformas de alojamiento de vídeos como puede ser YouTube o, más directamente relacionadas con Educación: Khan Academy. Esta última plataforma ha recibido el premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional por su contribución a la educación de millones de personas en todo el mundo y desde su casa.
Cuando Salman Khan comenzó a enseñar a sus primos a través de vídeos en el año 2004, empezó a imaginar una sociedad en la que todos tuvieran acceso a la educación, desde niños, hasta adultos. Una idea que comenzó a fraguarse gracias a los comentarios "jocosos" de sus primos pequeños: "Nos gustas más en YouTube que en persona".
Esta manera de educar surge gracias a los avances tecnológicos y se trata de una forma única y muy positiva para que todo el mundo pueda acceder a una educación formal y no formal. De hecho, ya existen cursos, grados e incluso másteres íntegramente online.
Quizá un adulto esté más preparado para gestionar toda la información que ofrece un curso online, pero, ¿un niño o adolescente? Mi opinión es que sí, en tanto en cuanto les guiemos y tengan siempre un adulto gestionando dichos aprendizajes. La idea de Flipped Classroom, por ejemplo, aplica ambas ideas, tratando de aumentar la motivación por esos aprendizajes que realizan los alumnos online y aprovechando que es motivadora para ellos, y posteriormente realizar un análisis práctico del aprendizaje teórico en el aula.
Por tanto, considero que no solo es una buena forma de enseñar y enganchar a los alumnos de nuestro siglo, sino que es importante tenerla en cuenta para profundizar aprendizajes, incluso nosotros mismos. Pero ciertamente no debe ser la única forma de aprendizaje, porque los detalles que los alumnos captan en una persona de referencia que está transmitiendo algo más que contenidos teóricos (lenguaje no verbal, emociones*...) no se pueden transmitir online.
Aquí tenéis la primera charla TED de Salman Khan (ha participado en otras ediciones de TED), en la que explica la motivación que le llevó a crear esta herramienta y el porqué la considera necesaria:
*De este tema hablo un poco más en el artículo del Periódico Magisterio: Aprendizaje Emocionante
Hoy, sin embargo, da la sensación de que se valora más la forma de transmitir la información y la gestión de la misma más que el hecho de que la persona deba poseer dicha información. Los continuos avances en la sociedad de la información y la comunicación hacen que cualquiera pueda acceder al conocimiento con un par de clics o con unos cuantos movimientos de pulgar. Por tanto, ¿qué conocimientos puede añadir una persona que no tenga Google?
Y ya no solamente Google, ahora están de moda las clases OnLine. Plataformas de alojamiento de vídeos como puede ser YouTube o, más directamente relacionadas con Educación: Khan Academy. Esta última plataforma ha recibido el premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional por su contribución a la educación de millones de personas en todo el mundo y desde su casa.
Cuando Salman Khan comenzó a enseñar a sus primos a través de vídeos en el año 2004, empezó a imaginar una sociedad en la que todos tuvieran acceso a la educación, desde niños, hasta adultos. Una idea que comenzó a fraguarse gracias a los comentarios "jocosos" de sus primos pequeños: "Nos gustas más en YouTube que en persona".
Esta manera de educar surge gracias a los avances tecnológicos y se trata de una forma única y muy positiva para que todo el mundo pueda acceder a una educación formal y no formal. De hecho, ya existen cursos, grados e incluso másteres íntegramente online.
Quizá un adulto esté más preparado para gestionar toda la información que ofrece un curso online, pero, ¿un niño o adolescente? Mi opinión es que sí, en tanto en cuanto les guiemos y tengan siempre un adulto gestionando dichos aprendizajes. La idea de Flipped Classroom, por ejemplo, aplica ambas ideas, tratando de aumentar la motivación por esos aprendizajes que realizan los alumnos online y aprovechando que es motivadora para ellos, y posteriormente realizar un análisis práctico del aprendizaje teórico en el aula.
Por tanto, considero que no solo es una buena forma de enseñar y enganchar a los alumnos de nuestro siglo, sino que es importante tenerla en cuenta para profundizar aprendizajes, incluso nosotros mismos. Pero ciertamente no debe ser la única forma de aprendizaje, porque los detalles que los alumnos captan en una persona de referencia que está transmitiendo algo más que contenidos teóricos (lenguaje no verbal, emociones*...) no se pueden transmitir online.
Aquí tenéis la primera charla TED de Salman Khan (ha participado en otras ediciones de TED), en la que explica la motivación que le llevó a crear esta herramienta y el porqué la considera necesaria:
*De este tema hablo un poco más en el artículo del Periódico Magisterio: Aprendizaje Emocionante
